Leonardo Da Vinci y el Sudario de Turín
QUESTION: Leonardo Da Vinci y el Sudario de Turín - ¿Creó Da Vinci la imagen?ANSWER:Leonardo Da Vinci es uno de los artistas más célebres del siglo XIV. Su obra de "La Última Cena" es conocida como una de las pinturas más extraordinarias de su tiempo, y mucha gente en el siglo XXI exhibe esta extraordinaria obra de arte en sus casas. Hoy existe mucha controversia en cuanto a que él es el pintor o fotógrafo del hombre llamado "Jesús" en el Sudario de Turín, por lo que afirman que el sudario es un engaño. Se dice que Da Vinci utilizó su propia imagen para el sudario. Examinemos esto y decidamos nosotros mismos si el trabajo de Leonardo Da Vinci y el Sudario de Turín son iguales.
Primero que nada, la imagen NO pudo haber sido pintada. No existen pigmentos ni pinceladas. Si hubiera sido pintado, existiría un contorno de la imagen, y no hay ninguno. Además, un incendio dañó el Sudario en 1532, de manera que las llamas habrían hecho que la pintura se agrietara si la imagen hubiera sido pintada. No hay señales de pintura agrietada.
Un descubrimiento científico también demuestra que la imagen no fue pintada. Examinemos cómo fue colocado el lienzo alrededor del hombre sobre el lienzo. El lienzo fue colocado sobre una piedra plana, y el cuerpo fue colocado encima de el, con la otra mitad doblada por encima de la cabeza hasta los pies. Luego fue ajustada alrededor del cuerpo utilizando bolsas de especias. La imagen está compuesta por muchas manchas difusas. Al observar las manchas se revela un cuerpo. La imagen sólo puede ser vista en un lado, mientras que la parte de atrás no muestra ninguna imagen, incluso cuando el Sudario es visto a través de la luz. Las únicas marcas visibles son marcas de sangre, las cuales penetraron la tela. Cuando se tomaron las primeras fotografías del Sudario, se encontró que la imagen negativa mostraba una coloración positiva, y adicionalmente, mostraba suficientes detalles como para dejar ver pequeñas marcas de azotes de hasta 2.5 centímetros. Esta clase de detalle es invisible a simple vista, por lo que solamente el hecho de esta imagen negativa es suficiente evidencia para demostrar que el sudario no es una falsificación pintada.
Además, Leonardo Da Vinci habría tenido que pedir el permiso de la familia de Saboya en Chambery, Inglaterra, para que le dieran el sudario en el año 1492 o alrededor de este tiempo. Entonces, en un solo intento, habría tenido que reproducir su propia imagen fotográfica sin cometer un error. La familia de Saboya pagó 50 francos de oro para reclamar la propiedad del Sudario, y en aquel momento estaban ocupados restaurando la Iglesia de Chambery con el propósito de albergar el Sudario, por lo que resulta difícil imaginar que le cederían el Sudario a un artista que vivía en Milán, Italia, para que alterara su preciada posesión.
Otro detalle en relación a Leonardo Da Vinci y el Sudario de Turín, es que él nació en 1452, 100 años después del supuesto tiempo en que el Sudario fue creado. Además, no existe ninguna evidencia en la historia de que haya sido producido algún otro negativo fotográfico en ese tiempo. A medida que continúan los estudios del Sudario, existe evidencia de muchas plantas así como detalles específicos de heridas en el cuerpo, de polen y tierra de Palestina, que la fotografía o pintura primitivas no hubieran podido crear.
De manera que, continuamos preguntándonos: "¿De dónde salió el hombre en la tela?"
La teoría más popular es la del "quemado" o "scorch," o teoría de la "radiación termonuclear." Los partidarios de esta idea sugieren que la intensidad de la luz y del calor originados por el cuerpo de Cristo en el momento de la resurrección pudieron haber quemado su imagen en la tela, muy parecido a como fueron quemadas "las sombras permanentes" de hombres en las paredes y otras superficies en Hiroshima, por la explosión atómica de 1945.
El apóstol Pablo escribió en Primera de Corintios 15:35-38-"Pero dirá alguno: '¿Cómo resucitarán los muertos? ¿Con qué cuerpo vendrán?' ¡Necio! Lo que tú siembras no se vivifica, si no muere antes. Y lo que siembras no es el cuerpo que ha de salir, sino el grano desnudo, ya sea de trigo o de otro grano. Pero Dios le da el cuerpo como él quiso, y a cada semilla su propio cuerpo."
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